Ciclismo
El español cimenta el liderato en el Baby Giro ganando en la cima del Lago di Campo Moro
Juan Ayuso, el ilusionante ciclista español, que reside en Italia y corre para el Colpack Ballan, disparó su cotización en el Lago di Campo, a 2.000 metros, donde el aire se enrarece, dispara las pulsaciones de los corredores e incrementa la agonia.
El barcelonés de 18 años se llevó la séptima etapa, elevándose entre las montañas alpinas que separan a Italia de Suiza, en un escenario que el Giro había descubierto en 2018 con el Giro Femminile cuando ganó la gran Annemiek Van Vleuten. Lo hizo para dejar enfilado la victoria final de una edición en la que ya ha ganado tres etapas -como hizo Tom Pidcock en la edición de 2020-, saca casi tres minutos al segundo clasificado y emite señales de estar delante de un corredor muy especial.
Una subida interminable
Ayuso, un tallo de 1,83 y 65 kg de peso que sube sin levantarse del sillín, respondió en la interminable subida al ataque del colombiano Jesús Peña a mitad del coloso italiano, un puerto de 30 kilómetros de un porcentaje progresivo, algún tramo con rampas que llegaban al 10 por ciento, antes de llegar a Largone, un paraje de flores silvestres a cuatro kilómetros de meta, donde se suavizaba la pendiente. Con ambos se fueron Verre, compañero del español, que perdió contacto a falta de 7 kms, y otros tres corredores entre los que sobresalía el danés Tobias Johannesen y el belga Vandenaabele (Team DSM), segundo y tercero en la general, y que también fueron cediendo.
Justo al pasar Largone, en el falso llano, Peña, un colombiano que se formó en el mountain bike y que pronto fichará por un equipo europeo, claudicó -llegó a 52 segundos- para gloria del español residente en Bérgamo, que sumó la octava victoria de un año que ha levantado la admiración de todo Europa que descuenta los días que faltan para el momento en que este verano dé el salto al World Tour de la mano del Emirates de Machín. Tras Bernal, Pogacar y Evenepoel, el cuarto Beatle está en camino.
